viernes, 8 de abril de 2011

Historias de fútbol: Javier Hernández

El fútbol siempre les pone a todos los jugadores muchos obstáculos para poder convertirse en profesonales, pero sólo los mejores logran cumplir sus metas y hacer realidad sus sueños, esto es lo que le ocurrió al que ahora porta el número 14 del Manchester United, número sobre el cual se puede leer claramente "chicharito".

Todo inició un primero de junio de 1988, cuando en Guadalajara, Jalisco vio la luz por primera ver Javier Hernández, hijo y nieto de dos seleccionados mexicanos en un Mundial: Javier "chícharo" Hernández (seleccionado en México 1986) y Tomás Balcázar (figura de Chivas y selecionado en Suiza 1954) respectivamente, quizá desde ese momento, se podría esperar un futuro prometedor para el chicharito, quien al menos, debía compartir el gusto por el fútbol como su padre y abuelo.

Desde pequeño empezó a jugar fútbol, pero fue hasta sus nueve años que ingresó a las inferiores de Chivas donde destacó en todas las categorías, en las que desde su temprana edad demostró corage y hambre de triunfo como en la actualidad y no sólo eso, sino también se podía ver en él una gran velocidad e inteligencia, y es así, como en el 2001, a sus trece años de edad pasa a formar parte del proceso infaltil de la Selección Mexicana que en el 2005 conquistaría la Copa del Mundo sub-17 en Perú, pasando por la selección sub-15 y posteriormente la sub-17.



Pero no todo fue fácil durante su camino hacia su debut en Primera división, su primer gran fracaso ocurrió precisamente a unos meses de que iniciara la Copa del Mundo sub-17, ya que una lesión ponía en riesgo su participación, sin embargo, pudo recuperarse poco antes de la justa, pero fue una decisión del técnico Jesús Ramírez la que lo dejó fuera del seleccionado mexicano que iría a Perú donde lograrían la hazaña más importante del fútbol mexicano: un campeonato mundial, en el cual pudo ver como los compañeros con quienes había compartido ese sueño lograban hacerlo realidad, así como también debutaban en Primera e incluso Carlos Vela (también jugador de Chivas) partía al fútbol europeo... uno de los golpes más duros de su carrera.

Como un gran jugador pero sobretodo, como una gran persona, pudo sobreponerse a este tropiezo sin perder la ilusión de debutar en primera división y formar parte de la selección mayor.

Fue durante ese año, en la temporada 2005-2006, que Javier pasó a formar parte del equipo Chivas-Coras, equipo filial de las Chivas en la antigua División A de México (actualmente liga de Ascenso) colocándose un poco más cerca del primer equipo.

No pasó mucho tiempo y en el torneo de apertura 2006 alcanzó uno de sus sueños un 9 de septiembre de ese mismo año, a sus 18 años debutó con el primer equipo de las Chivas ingresando al campo al minuto 82 siendo suficiente tan sólo un minuto para que anotara su primer gol en un partido en que las Chivas derrotarían 4-0 al Puebla, siendo el del chicharito, el último gol del partido.

A pesar de este gran debut, las cosas no fueron fáciles y se le presentó un segundo obstáculo: lograr la consoloidación y buscar un lugar titular, ya que durante ese año sólo jugó siete partido más en los cuáles no pudo volver a hacerse presente en el marcador.

Pero también le llegaría una nueva oportunidad, fue convocado para disputar el Mundial sub-20 en el 2007, en el cual estuvo a la sombra de Giovani dos Santos y Carlos Vela aprovechando los pocos minutos de juego que tuvo durante tres partidos para anotar un gol.



Pero las oportunidades con Chivas aún no llegaban y durante todo el 2007 y hasta en el 2008 solamente jugó 13 partidos en los que tampoco pudo hacer gol, ante una clara muestra de la falta de confianza y oportunidades que le daban, y es en este momento de su carrera cuando piensa en el retiro ante la falta de oportunidades y de ni saberse buen jugador, pero el apoyo de familiares y amigos le dio la fuerza y confianza para seguir adelante.




El año 2009 llegó y con este todo empezó a ir mejor para el chicharito, fue el Clausura de este año, en el que trás más de dos años volvió a anotar un gol con Chivas, y no fue el único, ya que en ese torneo donde tuvo mayor tiempo de juego, logró cuatro anotaciones en 15 partidos para empezar a hacerse de un lugar en el equipo titular, logro que vio alcanzado la temporada siguiente, es el Apertura 2009 cuando despunta como goleador y termina en tercer lugar de goleo con 11 goles en 17 partidos, pero su gran temporada llegaría en el Bicentenario 2010, nombre especial del torneo el año en el cual se celebraban 200 años de la independencia de México.

En este torneo tuvo un inicio sorprendente, anotó tres dobletes en las primeras tres jornadas para liderar desde muy lejos la tabla de goleo con seis anotaciones en tan sólo tres jornadas, pero su racha no terminaría ahí, ya que en los siguiente dos partidos también hizo goles para llegar a ocho en cinco jornadas, pero tuvo una lesión y eso le impidió seguir perforando las redes, y no volvió a sacudirlas hasta la jornada 11, y fue así, como al final del torneo, con 10 goles en 11 partidos (el torneo consta de 17 jornadas) terminó como Campeón de goleo junto con otros dos jugadores que habían participado en más partidos.



Y finalmente, el 8 de abril de 2010, a dos meses de que iniciara el Mundial de Sudáfrica, donde también tendría un pequeño tropiezo al ser relegado a la banca, se anunció que había sido fichado por el Manchester United... y el resto de la historia ya la conocemos.




Creo que el chicharito, como muchísimos aficionados lo conocen, es un gran ejemplo de trabajo, esfuerzo y dedicación y una clara muestra de que con determinación los sueños se hacen realidad.